Se inauguró el Centro Cultural de la UNC
La Facultad de Artes estuvo presente en la inauguración del nuevo Centro Cultural Paseo Córdoba de la Nueva Andalucía de la Universidad Nacional de Córdoba. Se trata de un particular conjunto edilicio en pleno casco céntrico de Córdoba, en la esquina de las calles Duarte Quirós y Obispo Trejo.
La obra completa, cuyo proyecto integral cuenta con la aprobación de la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos, representa una muestra cabal de la evolución de la arquitectura en Córdoba ya que consta de tres construcciones de distintas épocas: el antiguo Refectorio o comedor jesuítico, que data del siglo XVIII, un edificio del siglo XIX, donde funcionó el antiguo Instituto Técnico Universitario (ITU), y un flamante edificio de características más modernas. Este espacio cuenta con más de 3000 metros cuadrados, un auditorio para la realización de múltiples eventos, una plaza arqueológica y un museo de sitio con pasarelas donde se observan los muros que fueron descubiertos durante el desarrollo del edificio.
El rector Hugo Juri destacó el proceso de trabajo que implicó esta obra y remarcó que fue durante el mandato de la ex rectora Carolina Scotto, quien estuvo presente en la ceremonia, cuando se planificó la realización del Centro Cultural.
La decana de nuestra institución, Ana Mohaded, participó de la inauguración y recorrió los espacios. «La inauguración de este Centro Cultural y de interpretación de la UNC es para nuestra Facultad de Artes de enorme importancia por lo que implica en términos de espacio de visibilización, divulgación y encuentro para compartir la enorme producción artística, cultural y patrimonial de la comunidad universitaria y cuyo primer diseño se gestó en la gestión de la rectora Carolina Scotto», dijo Mohaded.
También estuvo presente el intendente de la ciudad de Córdoba, Martín Llaryora, quien resaltó que este paseo ya fue declarado «monumento nacional histórico y queremos que la manzana Jesuítica se extienda y este espacio sea un anexo, posibilitando así hacer crecer al turismo, a la historia y su cultura jesuita».
